martes, 7 de mayo de 2013

Los cormoranes que no verá mi hijo


En la foto anterior se puede observar como un barco, el mismo de siempre, recoge una red en la ensenada de Santa Gadea, bajo la atenta mirada de dos cormoranes moñudos que descansan en el posadero de la colonia de As Pantorgas (Tapia). Sin saberlo, están viendo una de las redes en las que muy probablemente acabará con su vida, como ya hizo con los más de 20 ejemplares anillados por nosotros que han muerto en los últimos años. Evidentemente la cifra real será mucho más elevada, ya que la mayoría de los casos no son notificados y sólo un pequeño porcentaje de las muertes corresponden a animales anillados.

Cormorán moñudo ahogado en un tresmayo

Desde el año 2003, la población de esta colonia ha pasado de las 35 parejas de entonces a las 17 parejas de censamos ayer mismo.

Evolución de la población nidificante de cormorán moñudo en el concejo de Tapia

En el mismo periodo de tiempo, la población total del concejo de Tapia, que se reproduce en 3 colonias, ha pasado de 61 parejas a tan sólo 32.

No soy capaz de recordar la cantidad de veces que hemos denunciado este hecho en la prensa. No recuerdo las veces que he ido a la Consejería de Medio Ambiente del Principado de Asturias a enseñarles los datos, a mostrarles las fotografías de los aparejos, a recordarles que ellos mismos han redactado un plan de manejo de la especie que tenía como principal objetivo "eliminar los factores de riesgo que puedan amenazar la supervivencia de las colonias de esta especie" y que marcaba como primera directriz "estableces zonas de protección y uso restringido en el entorno de las colonias". No ha servido para nada, porque nunca se ha hecho nada para evitarlo.

Jacobo y el cuadro de los cormoranes que le pintó mi amiga Yeon cuando nació

Cuando ayer Manolo y yo nos encontrábamos en la colonia de Pantorgas, confirmando la inminente extinción de los cormoranes moñudos, cuando veíamos como delante de nuestras narices un barco levantaba sus redes saltándose la ley mientras las autoridades responsables de evitarlo miraban hacia otro lado, porque no les importa en absoluto, me acordé de mi hijo Jacobo. Siempre tuve la ilusión de que algún día me pudiera acompañar a ver los cormoranes, a ver los pájaros negros que su padre ha estudiado desde hace más de 25 años. Pero cuando me pregunte por los patos del cuadro que hay en su habitación, los patos a los que saluda todas las mañanas cuando se levanta, no sabré que decirle.

Para entonces, los gestores, los consejeros, los que tendrían que haber evitado su extinción porque es su trabajo, seguirán haciendo reuniones, redactando planes de manejo que no se cumplen y encargando y gastando dinero en carteles y folletos para intentar vender un Paraíso Natural que ya nadie se cree.

NOTA: pinchad en las fotos para ampliarlas

11 comentarios:

  1. Sin palabras. Pasará como con el arao, extinguido como reproductor por la artes de enmalle, y nos estiraremos de los pelos. Lo peor de todo es que entonces no supimos a ciencia cierta qué pasaba y hoy sí. Y seguiremos defendiendo a estos pobrecitos pescadores que usan las llamadas artes tradicionales como si este término indicara algo bueno: ya es hora de que este sector, el último realmente paleolítico de nuestro mundo, deje de ser el único que, masacrando un recurso público, no concilia aún la conservación del medio con la explotación de un recurso!!

    Jon

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  2. Buena entrada David, la comparto por varias vías.

    Ánimo en cualquier caso; la vía es esta: números y divulgación, hasta que algún incompetente se marche y le sustituya alguien con ganas de trabajar. Mientras haya pajarracos negros habrá algo que hacer.

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  3. hace poco mas de un mes en mi blog hice esta entrada. http://jesus-desdemicadiera.blogspot.com.es/2013/03/deberia-dejar-de-leer.html merced a la cual recibi algunos anonimos del corte y estilo de "si os gustasn tanto los cormoranes ya os los mandamos disecados", "gracias a los cazadores" y alguna que otra perla de nulo contenido intelectual. y es que hay gente para todo. espero que cuando termine la temporada de pesca, organizen una batida de limpieza en comandita con los cazadores (antes de irse a almorzar, claro) :-)

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    1. Hola Jesús, esos comentarios son una buena muestra de la cultura de este país. Quizás sea verdad que no nos merecemos la naturaleza que tenemos, o quizás no sepamos defenderla como se merece.

      De todas formas, en esta entrada hablo del cormorán moñudo, que aunque muchos pescadores no lo distingan del grande, en primer lugar porque no les interesa, es una especie marina que no entra en los ríos.

      Por otra parte, una muestra de la catadura de esos señores es su costumbre de ocultarse bajo el anonimato.

      un saludo

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  4. Las artes de pesca modernas arrasan con todo lo que encuentran... Una pena

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  5. Excelente entrada David, aunque cabreante. Guapa foto la última, un abrazo.

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    1. Hoal Jose, la verdad es que cada día encuentro más difícil poner una entrada agradable, por eso de vez en cuando pongo alguna foto de una playa o algo parecido para relajar un poco, porque la realidad en Asturias es bastante lamentable.

      En cuanto a la foto, es de hace unos cuantos meses.

      un abrazo

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    2. Sigo tu Blog desde su creación y hoy me he animado a felicitarte, la visión que tienes de la naturaleza que nos rodea creo que es la real, la oficial es otra, comentarte que en nuestro territorio de Gipuzkoa después de varios decenios de extinción el comorán moñudo ha vuelto con fuerza y tenemos una docena de parejas reproductoras, hemos seguido tu blog como guía para el censo y control de los mismos.
      Un abrazo desde el extremo oriente cantábrico.

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    3. Jon Múgica Urteaga7 de mayo de 2013, 21:30

      Se me ha olvidado presentarme, soy Jon Múgica Urteaga de Itsas Enara Ornitología Elkartea.

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  6. Hola Jon, yo soy amigo de Jon Hidalgo, de Bizkaia, me imagino que lo conoceras. Él ya me comentó varias veces la recolonización de Gipuzkoa. Parece que en Euskadi las cosas pintan mejor para la especie que para el resto del Cantábrico.
    Al menos, por lo que me cuenta Jon, la administración está colaborando y financiado proyectos de conservación de la especie.
    un abrazo y muchas gracias por la visita

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  7. Las redes de nylon modernas están acabando con todo. Más metros de paño con más altura con menos peso, con capacidad de "embolsar" ( y hacer más díficil la retirada, incluso dandose cuenta del engaño) son un peligro para cualquier bipedo, plumado ó implume, que se meta al agua.
    Lo de la pesca profesional desafía toda lógica. Llevando al máximo las posibilidades extractivas solo para hacer la cifra. Pero son un grupo organizado, compacto y con capacidad para la confrontación, un problema ppara los políticos con mando en plaza

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