jueves, 22 de junio de 2017

La sorprendente historia de Nelson y Roz

El alcatraz atlántico (Morus bassanus) es una de las especies más comunes y fáciles de ver durante los pasos migratorios en el Cantábrico. Su gran tamaño, con casi 2 metros de envergadura y su color blanco puro con las puntas de las alas negras, lo hace inconfundible. Esta especie se reproduce en el Atlántico norte, tanto en América como en Europa, localizándose las colonias más meridionales de Europa en la Bretaña Francesa.

Alcatraces en Bass Rock

Los alcatraces, al igual que otras muchas aves marinas, forman colonias muy densas en islas o acantilados que en ocasiones pueden reunir más de 150.000 aves, como en la isla de Bass Rock, en Escocia, que actualmente es la mayor colonia reproductora del mundo de esta especie. 

miércoles, 14 de junio de 2017

Un zampullín con suerte y un final feliz, aunque...

En Asturias, sobre todo en las zonas bajas, la presencia de grandes masas de agua dulce es casi anecdótica y las pocas que se encuentran, a excepción de los ríos, son embalses dedicados a abastecer de agua a la industria o para consumo humano. Debido a esto, la mayoría de las anátidas y otras aves acuáticas reproductoras como fochas, somormujos y zampullines comunes se localizan en estas infraestructuras artificiales, algunas de las cuales se han ido naturalizando con el tiempo tras el crecimiento de abundante vegetación palustre. Por otra parte, en muchos de estos embalses se han soltado truchas, carpas y otras especies piscícolas para ser aprovechados como cotos de pesca intensiva.

La semana pasada, mientras daba un paseo por las orillas del embalse de La Barquera, en el río Nalón, observé a un zampullín que muy cerca de la orilla se sumergía continuamente saliendo a flote a los pocos segundos. En un primer momento no me llamó demasiado la atención pero cuando volví a pasar por el mismo lugar y volví a ver el mismo comportamiento sospeché que algo no iba bien. Me acerqué y comprobé que el zampullín estaba enredado y no podía liberase, así que me metí en el agua y al cogerlo en la mano observé que tenía un anzuelo clavado en el cuello del que colgaba un sedal que se había enredado a la vegetación.


Tras cortar el sedal comprobé que el ave estaba agotada y completamente empapada. Después del estrés sufrido y sin poder untarse con el aceite de su glándula uropigial, su plumaje había perdido su impermeabilidad y en esas condiciones, sin poder alimentarse y sin poder protegerse del frío, con toda seguridad se hubiera muerto de hambre o de hipotermia en unas pocas horas.

miércoles, 7 de junio de 2017

El cortejo de los abejarucos

Ayer pudimos disfrutar de una de las aves más bonitas de la Península ibérica gracias a la amabilidad de Miguel Sánchez, de LeoNatur, que nos permitió usar el hide que tiene instalado en una de las colonias de abejarucos de norte de León. La colonia está situada en un cortado arcilloso en el que más de 50 parejas han excavado sus nidos, compartiendo su ciudad con otras especies de aves, como los gorriones comunes, molineros y chillones.


El abajaruco (Merops apiaster) es un ave inconfundible ya que tiene un plumaje muy coloreado y brillante. El naturalista británico Edward Wright publicó un articulo en 1890 sobre esta especie y llegó a la conclusión de que el plumaje de los abejarucos tenía todos los colores salvo el rojo, pero esta ausencia la compensaban en el iris, que en los adultos estaba teñido de un imponente rojo sangre.